sábado, 11 de febrero de 2012

Plutôt la vie.

La gente piensa que un "para toda la vida" es demasiado tiempo para decirlo a la ligera, pero cuando encuentras a alguien que verdaderamente merece la pena, te das cuenta que tienen razón, es demasiado poco.

jueves, 6 de enero de 2011

Lo mejor que te puede suceder es que ames,y al mirar a la persona a la que amas,veas un brillo en sus ojos que es por tí. Lo mejor que te puede ocurrir es que día a día esa persona te demuestre que te ama. Lo mejor es.. que despiertes con una sonrisa porque sabes que esa persona quiere que tú le des todo tu amor,y que al anochecer te duermas con una sonrisa también,porque en tus sueños vas a seguir viendole. Pasar momentos juntos,siendo total y completamente felices el uno con el otro,eso es lo mejor que te puede pasar,amar y ser amado. Pero no todos tienen la suerte de poder averiguarlo. Hay personas que solamente piensan que el amor es un juego,o que en vez de dejarse llevar en esos momentos en los que debería de haber amor,deciden ser simplemente "personas que no se enamoran". Hay personas que luchan en todo momento porque estas personas cambien de idea,pero hay momentos en los que la persona,que intenta convencer a la persona que no cree en el amor de que verdaderamente sí existe el amor,flojea dejando que la persona que no cree en ello siga manteniendo su opinión.
Pero nadie ha dicho que yo vaya a flojear. Te demostraré que existe el amor,y te lo demostraré de mil y una maneras,día a día,cuando tú quieras.
Solo dimelo. Dime si es lo que realmente deseas.
Dime si lo que quieres es que yo te lo demuestre o simplemente quieres seguir con tus pensamientos.
Cuando me lo digas,entonces sabré que és lo que realmente sientes,porque creeme que en estos momentos llevo mil y un pensamientos dentro de mí. Nose que pretendes,pero esperare lo que deba esperar para averiguarlo.

jueves, 30 de diciembre de 2010

Siempre lo intentaría.

Un hombre muy sabio dijo una vez que no tendrás nada en la vida si lo sacrificas todo por ello. Lo que quería decir, es que nada llega sin un precio. Así que antes de meterte en una batalla, será mejor que decidas cuánto estás dispuesto a perder. Muchas veces, ir detrás de lo que te hace sentir bien significa dejar atrás lo que sabes que es correcto y dejar a alguien significa abandonar los muros que has construiste en tu vida. Por supuesto, los sacrificios más difíciles son los que no vemos llegar cuando no tenemos tiempo de pensar una estrategia, de escoger de qué lado estar o sopesar las posibles pérdidas. Cuando eso ocurre, cuando la batalla nos escoge a nosotros y no a la otra parte, es cuando el sacrificio puede resultar ser más de lo que podemos soportar.

miércoles, 29 de diciembre de 2010


A veces, la realidad entra a escondidas y nos muerde en el culo, y cuando el dique revienta, todo lo que te queda es nadar. El mundo de las apariencias es una jaula, no un escondite. Sólo podemos auto engañarnos algún tiempo. Nos cansamos, tenemos miedo. Negarlo no cambia la realidad. Tarde o temprano, tenemos que dejar de lado la negación y enfrentarnos al mundo cara a cara, con las armas preparadas. Negación. No sólo es un río de Egipto, es un océano inmenso. ¿Pero cómo lograr no ahogarte?

domingo, 26 de diciembre de 2010

Empezar a asimilar lo raro que es todo si no estás.

Hace cientos de años, Benjamin Franklin compartió el secreto de su éxito con el mundo. "Nunca dejes para mañana lo que puedas hacer hoy", dijo. Ese es el hombre que descubrió la electricidad. ¿No creéis que tendríamos que escuchar más lo que dijo? No sé por qué posponemos todo, pero si tuviese que adivinarlo, diría que tiene mucho que ver con el miedo. Miedo al fracaso, miedo al dolor, miedo al rechazo. A veces, el miedo es tomar una decisión, porque, ¿qué pasa si te equivocas? ¿Qué pasa si cometes un error y no puedes arreglarlo? Sea lo que sea de lo que tengamos miedo, una cosa es cierta. Cuando el dolor de algo no es lo único, no hay nada peor que el miedo a ello.
El pájaro mañanero más rápido atrapará al gusano. Quien duda, está perdido. No podemos pretender que no nos lo habían dicho. Todos hemos oído los proverbios, oído a los filósofos, oído a nuestros abuelos hablar sobre el tiempo perdido, oído a los malditos poetas animándonos a vivir el momento. Aún así, a veces... tenemos que verlo por nosotros mismos, tenemos que cometer nuestros propios errores, tenemos que aprender nuestras propias lecciones, tenemos que barrer la posibilidad de hoy bajo la alfombra de mañana antes de que no podamos más, hasta que finalmente entendamos lo que Benjamin Franklin quiso decir: que saber es mejor que preguntarse, que despertarse es mejor que estar dormido. Hasta el peor error, incluso uno irrevocable, supera el
infierno de nunca haberlo intentado.