-Le observé fijamente, deseando más que nunca ese futuro que
nunca ocurriría, que aquel momento durara para siempre o si no, que yo dejara de
existir cuando acabara.
Al final del día, la fe es algo maravilloso, aparece cuando menos te la esperas. Es como si un día te dieras cuenta que los cuentos de hadas pueden ser un poco diferentes a lo que soñaste. El castillo, bueno, puede que no sea un castillo, y que no es tan importante lo de "y vivieron felices para siempre". Sólo feliz ahora. De vez en cuando, con un azul luna, la gente puede sorprenderte. Y de vez en cuando, la gente incluso puede dejarte sin aliento.
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